Medios de pacotilla, periodistas babosos, hoy me cogieron sin compasión.
Volvieron a sacar del tinterillo el tema de TLC y Colombia. ¿Porqué preguntará el ingenuo?. Porque estamos en elecciones mi amigo, y cuando las elecciones se acercan las mentiras se agrandan y los aparatos que mueven votos inician su guerra sucia, valga la redundancia.
Entonces, si le interesa saber por qué ha salido ésta noticia en todos los medios, y porque éste será el tema de nuestra relación con los Estados Unidos mientras reelegimos al sida o elegimos al ébola, abra los ojos y vea lo que ha estado sucediendo mientras el tema estuvo en el tintero.
- Como ya instalaron bases, ya es mucho más fácil mantener un ojo sobre la mercancía!
- La reelección no le es favorable al TLC, y como los terratenientes vendidos de éste país (algunos que ahora se harán ver como la renovación y sofisticación de la seguridad democrática), ya se dieron cuenta que la reelección alborota a la masa, entonces muchos buscan mostrar la transición. Claro, y como tienen escuela en Estados Unidos con la elección mediática de Obama, será fácil vender el optimismo y la transición.
- Adelanto mi vaticinio. Hay reelección, si y solo sí, la mafia más sucia, corrupta y huntada de las cochinadas de éste gobierno, declara una guerra contra la élite mencionada en el anterior punto, y la clase terrateniente que nunca tuvo que vender droga porque ya tenía demasiadas cosas en sus manos.
- Todos ellos, son los dueños de éste país. Y saben que el TLC, que BUSH también pidió al congreso por sus 8 largos años de gobierno, tiene más opción con un aire de renovación., o con un gobierno que no sea tan descarado y mentiroso respecto a su barbarie y polarización. Lo que pasa es que como buenas mafias y élites, también se pelean entre si mismas y lo que están decidiendo, es como repartirse la torta por los próximos años.
- La misma historia de antes. Sólo que el país se traquetizó con estilo y confianza.
- El congreso aprueba el TLC y no OBAMA. Todos los que pensabamos que Bush tenía ese poder, nos dimos cuenta que estabamos engañados. El congreso Estadounidense cuenta con una participación muy poderosa de las élites de poder y en ese caso no le hicieron todo el caso a las mafias petroleras en la casa blanca.
- Ahora que el morocho de Fox y Goldmann Sachs está en el gobierno, para prometer y decir lo mismo que dijeron sus antecesores, pero con un carisma y credibilidad respaldados por los medios y su papel en éste juego. El hombre se ganó un nobel de paz por mantener todo igual, pero hacerle creer a la gente que es diferente. Envió hombres a Afghanistan para "desmovilizar" y hacer una transición, pero un mundo en eterna transición ha sido éste desde que las mafias corporativas controlan al país del Norte. Estados Unidos no es libre.
- Para el que no recuerde porque el TLC no ha sido aprobado, es porque Estados Unidos, a través del congreso, ha recibido presiones de todas partes por las constantes violaciones descaradas a los derechos humanos y otros internacionalmente reconocidos, cubiertos por la gran cortina de humo que ha sido todo el Uribismo.
- Porque mis amigos, el Uribismo es mucho más grande que Uribe, quien al fin de cuentas le costará trabajo perder la adulación que lo ha puesto en el pedestal presidencial. El fascismo también fue más grande que Hitler, así lo vendieran de forma contraria.
- Los hombres mueren, las ideas quedan.
Entonces, espero que alguien lea ésta advertencia, porque tendremos tlc y obama para largo rato! Con o sin Uribe!! El sida, el cáncer o el ébola... ¿Que diferencia hay al final?
Como fue advertido, ésta noticia me ha agarrado sin compasión y sin decencia.
A continuación está la noticia publicada en el Espectador... ni pierdan el tiempo visitando eltiempo.com o súbditas, porque es eso, perder el tiempo.
Se despeja aún más el futuro del Tratado de Libre Comercio entre Colombia y Estados Unidos.
El presidente norteamericano Barack Obama le pedirá al Congreso de su país que apruebe el TLC este mismo año. Así consta en una entrevista que el propio Obama le dio a la agencia Bloomberg y que aparece mañana en la revista Business Week. La agencia divulgó hoy un avance del diálogo.
Según la información que anticipa la página web del semanario, el presidente afirma en la entrevista que “él y su gobierno han intentado una agenda ‘fundamentalmente favorable a los negocios’ y que son ‘partidarios del libre comercio’, con lo cual rechaza las críticas de algunos sectores empresariales”.
Y agrega Business Week en su portal de Internet: “El presidente asegura que presionará al Congreso para que este año apruebe los tratados de libre comercio con Corea del Sur, Panamá y Colombia, aunque advirtió que hay que negociar con cada uno de esos países para superar ‘distintos tropiezos’ que se han presentado”.
El TLC fue firmado por Colombia y Estados Unidos el 22 de noviembre del 2006 en la sede del Banco Interamericano de desarrollo (BID) en Washington. Poco después, el entonces presidente republicano George W. Bush lo envió al Congreso para que fuera sometido a votación, pero la presidenta del Legislativo, la demócrata Nancy Pelosi, se las ingenió para meterlo al congelador.
El principal argumento para hacerlo era la presión de las centrales sindicales norteamericanas (agrupadas bajo la sigla AFL-CIO), preocupadas por la violencia contra los trabajadores en Colombia y por la impunidad en las investigaciones de los crímenes contra los miembros de los sindicatos en este país.
Esas centrales sindicales no sólo están vinculadas al partido demócrata sino que han financiado parte de las campañas de los congresistas de esa colectividad. Desde las elecciones legislativas de noviembre de 2006, la bancada demócrata controla las mayorías en el Senado y la Cámara estadounidenses.
Durante la campaña presidencial de 2008, el también demócrata Obama se mostró reticente a la aprobación del TLC en el Congreso norteamericano. Dijo que primero había que resolver los líos que tienen los sindicalistas colombianos para ejercer sus derechos. Ahora el presidente parece haber cambiado. La necesidad de exportar a otros mercados como el colombiano lo ha hecho pensar nuevamente en el tema.
“Me parece una gran noticia. Estamos muy complacidos no sólo porque el presidente Obama hubiera mencionado el TLC en el Discurso del Estado de la Unión y nuevamente en Business Week, sino porque Estados Unidos entienda que el libre comercio es útil para la creación de empleo”, le dijo a Semana.com la embajadora en Washington, Carolina Barco. “Vamos a seguir trabajando con el gobierno y el Congreso norteamericanos para lograr la aprobación del tratado en un futuro próximo”, agregó.
Con estos antecedentes, ¿qué viene ahora? Primero, una nueva negociación entre Estados Unidos y Colombia para superar esos “tropiezos” de los que habla Obama. Segundo, el diálogo entre el presidente norteamericano y su copartidaria, la señora Pelosi. Y, por último, la decisión de la presidenta del Legislativo. Sólo en ese momento se sabrá si hay o no TLC.
Por otra parte, Obama, en su charla de 35 minutos con periodistas de Business Week, destaca que es irónico que mientras la izquierda lo acusa de favorecer el bolsillo de las grandes compañías, la derecha le critica que pretenda debilitar al mundo de los negocios. A propósito de este último punto, el presidente enfatiza que este año firmará leyes para reducir en 70.000 millones los impuestos a las empresas de gran envergadura
Volvieron a sacar del tinterillo el tema de TLC y Colombia. ¿Porqué preguntará el ingenuo?. Porque estamos en elecciones mi amigo, y cuando las elecciones se acercan las mentiras se agrandan y los aparatos que mueven votos inician su guerra sucia, valga la redundancia.
Entonces, si le interesa saber por qué ha salido ésta noticia en todos los medios, y porque éste será el tema de nuestra relación con los Estados Unidos mientras reelegimos al sida o elegimos al ébola, abra los ojos y vea lo que ha estado sucediendo mientras el tema estuvo en el tintero.
- Como ya instalaron bases, ya es mucho más fácil mantener un ojo sobre la mercancía!
- La reelección no le es favorable al TLC, y como los terratenientes vendidos de éste país (algunos que ahora se harán ver como la renovación y sofisticación de la seguridad democrática), ya se dieron cuenta que la reelección alborota a la masa, entonces muchos buscan mostrar la transición. Claro, y como tienen escuela en Estados Unidos con la elección mediática de Obama, será fácil vender el optimismo y la transición.
- Adelanto mi vaticinio. Hay reelección, si y solo sí, la mafia más sucia, corrupta y huntada de las cochinadas de éste gobierno, declara una guerra contra la élite mencionada en el anterior punto, y la clase terrateniente que nunca tuvo que vender droga porque ya tenía demasiadas cosas en sus manos.
- Todos ellos, son los dueños de éste país. Y saben que el TLC, que BUSH también pidió al congreso por sus 8 largos años de gobierno, tiene más opción con un aire de renovación., o con un gobierno que no sea tan descarado y mentiroso respecto a su barbarie y polarización. Lo que pasa es que como buenas mafias y élites, también se pelean entre si mismas y lo que están decidiendo, es como repartirse la torta por los próximos años.
- La misma historia de antes. Sólo que el país se traquetizó con estilo y confianza.
- El congreso aprueba el TLC y no OBAMA. Todos los que pensabamos que Bush tenía ese poder, nos dimos cuenta que estabamos engañados. El congreso Estadounidense cuenta con una participación muy poderosa de las élites de poder y en ese caso no le hicieron todo el caso a las mafias petroleras en la casa blanca.
- Ahora que el morocho de Fox y Goldmann Sachs está en el gobierno, para prometer y decir lo mismo que dijeron sus antecesores, pero con un carisma y credibilidad respaldados por los medios y su papel en éste juego. El hombre se ganó un nobel de paz por mantener todo igual, pero hacerle creer a la gente que es diferente. Envió hombres a Afghanistan para "desmovilizar" y hacer una transición, pero un mundo en eterna transición ha sido éste desde que las mafias corporativas controlan al país del Norte. Estados Unidos no es libre.
- Para el que no recuerde porque el TLC no ha sido aprobado, es porque Estados Unidos, a través del congreso, ha recibido presiones de todas partes por las constantes violaciones descaradas a los derechos humanos y otros internacionalmente reconocidos, cubiertos por la gran cortina de humo que ha sido todo el Uribismo.
- Porque mis amigos, el Uribismo es mucho más grande que Uribe, quien al fin de cuentas le costará trabajo perder la adulación que lo ha puesto en el pedestal presidencial. El fascismo también fue más grande que Hitler, así lo vendieran de forma contraria.
- Los hombres mueren, las ideas quedan.
Entonces, espero que alguien lea ésta advertencia, porque tendremos tlc y obama para largo rato! Con o sin Uribe!! El sida, el cáncer o el ébola... ¿Que diferencia hay al final?
Como fue advertido, ésta noticia me ha agarrado sin compasión y sin decencia.
A continuación está la noticia publicada en el Espectador... ni pierdan el tiempo visitando eltiempo.com o súbditas, porque es eso, perder el tiempo.
Se despeja aún más el futuro del Tratado de Libre Comercio entre Colombia y Estados Unidos.
El presidente norteamericano Barack Obama le pedirá al Congreso de su país que apruebe el TLC este mismo año. Así consta en una entrevista que el propio Obama le dio a la agencia Bloomberg y que aparece mañana en la revista Business Week. La agencia divulgó hoy un avance del diálogo.
Según la información que anticipa la página web del semanario, el presidente afirma en la entrevista que “él y su gobierno han intentado una agenda ‘fundamentalmente favorable a los negocios’ y que son ‘partidarios del libre comercio’, con lo cual rechaza las críticas de algunos sectores empresariales”.
Y agrega Business Week en su portal de Internet: “El presidente asegura que presionará al Congreso para que este año apruebe los tratados de libre comercio con Corea del Sur, Panamá y Colombia, aunque advirtió que hay que negociar con cada uno de esos países para superar ‘distintos tropiezos’ que se han presentado”.
El TLC fue firmado por Colombia y Estados Unidos el 22 de noviembre del 2006 en la sede del Banco Interamericano de desarrollo (BID) en Washington. Poco después, el entonces presidente republicano George W. Bush lo envió al Congreso para que fuera sometido a votación, pero la presidenta del Legislativo, la demócrata Nancy Pelosi, se las ingenió para meterlo al congelador.
El principal argumento para hacerlo era la presión de las centrales sindicales norteamericanas (agrupadas bajo la sigla AFL-CIO), preocupadas por la violencia contra los trabajadores en Colombia y por la impunidad en las investigaciones de los crímenes contra los miembros de los sindicatos en este país.
Esas centrales sindicales no sólo están vinculadas al partido demócrata sino que han financiado parte de las campañas de los congresistas de esa colectividad. Desde las elecciones legislativas de noviembre de 2006, la bancada demócrata controla las mayorías en el Senado y la Cámara estadounidenses.
Durante la campaña presidencial de 2008, el también demócrata Obama se mostró reticente a la aprobación del TLC en el Congreso norteamericano. Dijo que primero había que resolver los líos que tienen los sindicalistas colombianos para ejercer sus derechos. Ahora el presidente parece haber cambiado. La necesidad de exportar a otros mercados como el colombiano lo ha hecho pensar nuevamente en el tema.
“Me parece una gran noticia. Estamos muy complacidos no sólo porque el presidente Obama hubiera mencionado el TLC en el Discurso del Estado de la Unión y nuevamente en Business Week, sino porque Estados Unidos entienda que el libre comercio es útil para la creación de empleo”, le dijo a Semana.com la embajadora en Washington, Carolina Barco. “Vamos a seguir trabajando con el gobierno y el Congreso norteamericanos para lograr la aprobación del tratado en un futuro próximo”, agregó.
Con estos antecedentes, ¿qué viene ahora? Primero, una nueva negociación entre Estados Unidos y Colombia para superar esos “tropiezos” de los que habla Obama. Segundo, el diálogo entre el presidente norteamericano y su copartidaria, la señora Pelosi. Y, por último, la decisión de la presidenta del Legislativo. Sólo en ese momento se sabrá si hay o no TLC.
Por otra parte, Obama, en su charla de 35 minutos con periodistas de Business Week, destaca que es irónico que mientras la izquierda lo acusa de favorecer el bolsillo de las grandes compañías, la derecha le critica que pretenda debilitar al mundo de los negocios. A propósito de este último punto, el presidente enfatiza que este año firmará leyes para reducir en 70.000 millones los impuestos a las empresas de gran envergadura
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